La
confluencia del Toa y el Jaguaní es uno de los lugares naturales más
impresionantes que tenemos en Cuba. Aislado de toda actividad humana,
los ríos moldean su lecho cambiante según el humor que el clima les
provoque, de la misma manera que un adolescente cambia de parecer,
premiando al visitante con un espectáculo de agua y arena.
Boca de Jaguaní 2016 |